Regálame un segundo de tu tiempo, no pretendo llenar tus ojos de magia ni darte la formula de la felicidad, si dijera eso seria una burda mentira. Solo tengo la humilde intención de mostrarte mis palabras que no son las únicas.
Hay que detenerse a reflexionar en algún momento, pensar las cosas en frió y tratar de darle un grado de objetividad para que su resultado sea lo mas optimo posible.
Decidir, decidimos todos los días, sobre cosas corrientes que por creerlas de tal manera le restamos importancia. Tendríamos que pensar la rutina, las acciones cotidianas, son las que van elaborando las decisiones próximas.
Hoy nuestra sociedad tiene grandes falencias horrorosas que tenemos que tratar de resolverlas, hay un refrán que dice que para cambiar hay que empezar por uno. Aquí esta el dilema, ¿queremos cambiar algo?
Soy muy critico del sistema y sus grietas están ala vista de cualquiera es solo abrir un poco los ojos y ver con una mirada mas critica que nos permita poder reflexionar sobre ciertas cosas, lo que seria un gran ejercicio para afrontar los retos que nos depara el futuro a nosotros y a nuestras generaciones futuras, o tenemos la intención de dejarles este mundo en decadencia.
Desde mi optimismo tenemos una oportunidad grande como región para ser respetados como tales y mostrar nuestras infinitas virtudes, las riquísimas culturas que aquí conviven. América Latina tiene su oportunidad y somos parte de ella.
Antes de terminar traigo a reflexión una pregunta que hacia Matías Martin, conductor argentino, en su programa de televisión. “¿Y vos de que lado estas?”
Diego Albeira